lunes, 31 de octubre de 2011

INFORMACION RESIDUAL

La aeronáutica desde hace un tiempo, incursiona en el análisis del fenómeno aéreo anómalo movida por el significativo número de reportes, en los cuales se han visto involucradas aeronaves y FANIs.
Extraño a lo que parece en escena, la manifestación de los fenómenos se mantiene en cantidad, pero no en calidad. En efecto, parte de los mitos relacionados con el tema, es que las observaciones aumentan exponencialmente con los años y ese es un argumento utilizado de manera recurrente por la ufología, siendo la realidad completamente distinta. Las razones, principalmente apuntadas a un problema vinculado a la seguridad aeroespacial, el cual esta siendo abordado de manera muy cuidadosa, y la segunda es que simplemente los pilotos, controladores y en general, todas las personas vinculadas a la aviación, están informado lo que ven sin temor a que se les tilde o denomine dementes.
Asentado en la primera razón precisamente, la seguridad aeroespacial posee hoy la política de puertas abiertas, la cual ha obtenido ribetes insospechados, en comparación con este tema hace unas décadas. Y es que la aviación, como todo mercado donde se trabaja con personas (en especial pasajeros), es esencia de los cuestionamientos y centro de polémicas internacionales en el caso de un accidente donde se compruebe el error o negligencia humana. Por lo tanto, cabe la sencilla pregunta ¿Qué pasa si un avión se accidenta y tiene víctimas fatales producto de la interacción o impacto de un OVNI?
La respuesta, solamente imaginando estas circunstancias, es extremadamente compleja. Por lo tanto, la medidas que se comenzaron a adoptar en diferentes partes del mundo, incluyendo Chile, escudriñar en la prevención de este tipo de tragedias y por ende, como información anexa, se intenta comprender en alguna medida la(s) naturaleza(s) de los fenómenos.
En directa relación a la seguridad y el fenómeno OVNI, la educación, constituye el primer paso para un positivo programa de prevención de incidentes o incluso de accidentes. Efectivamente, es la base sobre la cual se cimientan todas las demás actividades de seguridad aeroespacial.
La educación sobre prevención de incidentes OVNI, debe estar presente en todos los niveles de las organizaciones, dependiendo del grado de compromiso o responsabilidad que tenga una persona con relación a la administración de la seguridad aérea, es decir hoy todos los estamentos vinculados a la aeronáutica han tomado conciencia de la realidad de estas manifestaciones, las que en algunos reportes significan un verdadero problema.
Me atrevo de decir que Chile, es uno de los países donde la cognición conjunta ha desarrollado un fluido campo de reportes y entrega de información aeronáutica del tema. No es de extrañar que dentro del CEFAA, parte importante de sus asesores, en espacial los miembros de las Fuerzas Armadas, sean pilotos.
No es extraño tampoco, que las instituciones tanto civiles como militares, abran sus puertas a recibir las charlas que se entregan, con el propósito de educar y de motivar la entrega de información en los casos que existan observaciones.
Por lo tanto, creo que existen algunos errores conceptuales muy graves, en relación a la función del CEFAA y a sus tareas específicas. Ya que su misión principal es recopilar antecedentes, reportes e informes AERONÁUTICOS, vinculados con el fenómeno de los OVNIs o como se menciona en aviación FANIs.
El resto de las pesquisas, hablemos de filmaciones, fotografías, comentarios y relatos, son información que obviamente es recibida y clasificada, pero que idealmente debieran tener algún grado de vinculación con los reportes aéreos. Si alguno de ellos trasciende y es publicado, con la connotación mediática de por medio, es lógico que será materia de debate y discusión. Pero por favor, no es recomendable ocupar el nombre de este comité para respaldar algún vestigio fortuito que generalmente, no aporta mucho para entender el fenómeno de los OVNIs.

viernes, 28 de octubre de 2011

LA ÚLTIMA....OBSOLETA MODA

Cuando mencionamos el fin de la Ufología Clásica, hacemos la irresistible comparación con nuestra realidad contemporánea global y sus probables rutas alternativas.
Me hago esa pregunta simplemente al observar lo que sucede en nuestro país, en el sentido que se mantienen ciertos modelos y vías para el estudio de los OVNIs, a pesar que por décadas, algunos de estos procedimientos no han servido para establecer conclusiones contundentes. Es decir, se imitan los experimentos de estudio forzosamente, quizás con la esperanza de encontrar nuevas respuestas y al parecer los resultados no varían.
En ese sentido, es imposible evadir el bombardeo mediático a las innumerables actividades ufológicas que se están desarrollando en Chile en estos meses, las cuales consisten en charlas, conferencias y sobre todo las famosas y vitoreadas vigilias.
¿Qué es una vigilia?, consiste en salir a sectores apartados de la urbe, otras veces dentro de ciudades, con la esperanza de la aparición de algún fenómeno aéreo anómalo y lograr documentarlo. Las razones o motivaciones deben ser miles, pero las más publicadas son el vivir en grupos de personas aficionadas, la experiencia de observar un OVNI en terreno, en vivo y en directo. Los orígenes, vienen desde el mismo 1947 pero con los años y el “perfeccionamiento” de la Ufología, las vigilias han evolucionado en el empleo de medios técnicos para respaldar y registrar tales encuentros fortuitos.
Cabe mencionar que en 1983 nace en Noruega el famoso proyecto Hessdalen, el cual gracias a sus registros fílmicos y fotográficos después de años de vigilias técnicamente apoyadas, le permitieron entrar en el debate científico probatorio de la existencia de los OVNIs en el informe Sturrock de 1997.
No puedo dejar de lado el reconocimiento a quienes practican este tipo de actividades, por su inagotable y obsesivo entusiasmo de intentar observar y registrar en alguna oportunidad, un encuentro con un OVNI. Es cierto que ha habido vigilias que han logrado presenciar algunas cosas, que nunca pasan más allá que el registro de simples luces, pero que nutren de convicción para persistir con aquella ingrata tarea. Sin dejar de lado por su puesto, los cuantiosos fraudes vinculados, entre los cuales hay focos intencionalmente puestos para tales efectos, vehículos, meteoros ígneos, satélites, auroras y todo tipo de fenómenos con explicación, que se les ha otorgado una connotación diferente a su real origen y que no son precisamente lo que se busca, OVNIs.
Si a estas salidas a terreno, se las complementa con otros elementos que aumenten el discernimiento de las personas, como por ejemplo se enseña astronomía, tienen un valor agregado que intensifica el propósito de las vigilias y además sirve para conocer otras materias afines. Aunque para ser sincero, se suele asociar a los temas ufológicos con la astronomía, lo que significa un insulto para los científicos (Pregúntenle a Dante Minnitti), lo cual por ciento, es uno de los tantos resultados de la contaminación de la información ufológica. Si están en desacuerdo con este criterio, revisen por favor los viajes espaciales de Sixto a la octava luna de Júpiter.
De todas formas, sin parecer peyorativo, las vigilias seguirán siendo un camino y modelo a seguir dentro de la desesperada búsqueda de evidencias en el fenómeno de los OVNIs. Tengan o no resultados, cautivan a numerosas personas que esperan pacientemente que alguna "inteligencia" ojala extraterrestre se digne simplemente en mostrarse o hacer el anhelado "contacto", a pesar de lo quimérico la concurrencia masiva es destacable. Quizás atraídos por la inagotable logística previa y posterior a las vigilias, ya que las hay sin nada, otras con simple café y algunas con menesteres dignos de un ágape de fiestas patrias.
En mi caso no las comparto porque, independiente a que las vigilias son parte de la ufología clásica, me dan la sensación de estar en una casa deshabitada, esperando que me hable un fantasma. La verdad, me asustaría más avistar y grabar un ratón cola larga porque sé que podría contagiarme con el virus hanta, a su vez, en las vigilias si no estamos abrigados, podremos registrar los días posteriores un buen resfrío.

martes, 25 de octubre de 2011

TECHO MAXIMO

Hace unos meses publiqué un artículo llamado Alienígenas Ancestrales (http://www.aech.cl/2011/07/alienigenas-ancestrales.html), en la página de la Asociación Escéptica de Chile, a quienes les agradezco por su gentileza y amabilidad de facilitarme el espacio para tal efecto, siendo que ellos saben que no soy precisamente escéptico.
Junto con analizar el concepto al cual obedece este atractivo dueto de palabras, comenté que una de las razones por las cuales se ha sobrevalorado esta figura dentro del estudio de los OVNIs, es sencillamente porque la ufología y en especial la clásica, toco techo.
Como señalé, esto ocurre al no consignar una prueba categórica de la existencia o de la presencia de extraterrestres en el universo y lógicamente, de visita en nuestro planeta. Es decir, hoy día no existe ni una sola comprobación de esto y menos de la “probable” o “posible” (muletillas ufológicas) intervención extraterrestre en nuestra civilización.
Consecuentemente, por más que se exponga lo contrario, los argumentos de la ufología están en franco proceso de extinción de manera inapelable, porque las demostraciones que son motivo de análisis, se limitan a la exhibición de fotografías, videos y testimonios donde su núcleo principal, lo constituyen luces con movimientos erráticos.
Frente a este punto, no podemos prescindir la ambiciosa idea, casi irrisoria por lo demás, de encontrar esa señal o prueba tan remota que afirme la interacción con otras formas de vida inteligente. Aspecto que se encuentra hoy en una especie de utopía y que se maneja en el ámbito de los licenciosos deseos que tenemos algunos de que suceda, contrarrestado con los hechos concretos que se observan y analizan. – Hago mención a que me sumo a estos deseos, pero con la clara convicción que es tan solo un anhelo, no una realidad y lo tengo muy claro.-
De esta manera los investigadores, estudiosos e interesados en el tema, acérrimos a la idea de una decadencia del maravilloso mundo de los platillos volantes y con menesterosas posibilidades de encontrar una explicación satisfactoria, asienten elucubrar una sucesión de materias alternativas, que permiten amparar sus presuntuosas hipótesis, soslayando la confirmación pública de que hasta nuestros días, no hay forma de justificar como tal, la coexistencia de los reputados OVNIs, pese a que la ciencia y en especial la aeronáutica, ya aceptan abiertamente la figura de un fenómeno aéreo no identificado o FANI.
Quizás el cambio del acrónimo utilizado ó la incursión de científicos y personas relacionadas al mundo de la ciencia y la aviación, generan un rechazo mayor de lo previsto.
Lo que hoy nos ofrece la ufología, esta basado en hipótesis, nada más. Y las supuestas pruebas que nos ahondan, son en su gran mayoría registros fotográficos y fílmicos de luces y cuando más, algún objeto no identificado observado o furtivo, pero que no cumplen con las expectativas ni la contundencia para poder entrelazar ideas (hipótesis) con hechos (imágenes).
Este problema de las pruebas, al cual no encentro otro adjetivo calificativo que problema, se encuentra a nivel mundial y es la razón de fondo por la cual la ufología en su esencia romántica, ha perdido sentido, fuerza y porque negarlo legitimidad, ya que al trabajo honrado de algunos incansables investigadores, se le suman los desafortunados y delirantes aportes de los especuladores, quines no escatiman argumentos para validar abducciones, contactos, Islas mágicas, hipnosis, implantes y mensajes celestiales.
Es por esta razón, dejando de lado todo el sarcasmo con el cual a veces me refiero a estas personas, son ellos los verdaderos culpables, no tan solo del fin de la ufología clásica, sino que también del ascenso de este tema a su techo máximo (como decimos los pilotos), por lo tanto, creo que es conveniente aterrizar y reabastecerse de nuevo combustible y porque no, buscar una ruta alternativa.

domingo, 23 de octubre de 2011

LA DOCTORA MENTY MOSS


El pasado Miércoles tuve la oportunidad de ver la obra de teatro “Recomendaciones para el 2012”, en el aula Magna de la Escuela Técnica Aeronáutica de la DGAC.
Esta obra escrita y dirigida por Claudio Reyes, presenta a través de la ficción, una conferencia que es dictada por dos personajes, el ufólogo chileno Israel Demier y una científica norteamericana, la Doctora Menty Moss.
En la comedia, exhibida gratuitamente para todo público y parte del alumnado de esa casa de estudios, se cubren varias temáticas vinculadas al 2012 y a un supuesto plan intergaláctico diseñado por una raza extraterrestre, con el objeto de salvaguardar la especie humana de todos los terribles pronósticos que se aprontan para esa controversial fecha.
Debo confesar que me reí demasiado y que claramente, se ven reflejados algunos personajes de la ufología nacional y extranjera.
Al término de la obra, parte de los espectadores pudimos compartir con el elenco. Por esas coincidencias de la vida, el director y autor de la obra fue mi compañero de curso durante la enseñanza media a principios de los 90, en el Instituto Alonso de Ercilla (Hermanos Maristas).
Sorprendido, pero a la vez complacido con tal encuentro, comenzamos a recordar nuestra tan querida época escolar y el cómo pese a la distancia de los caminos, siempre resulta muy grato reencontrarse con amigos de la niñez.
Independiente de nuestros amenos recuerdos, no pude eximirme de preguntar las motivaciones para escribir esta obra y sobre todo, el cómo este director trabajó a los personajes y sus guiones. Las respuestas, a mi juicio fueron muy simples. En cuanto a las razones del montaje, sencillamente porque es lo que está de moda. En realidad fue muy estúpido de mi parte, pensar que solamente esta contingencia nos atañe a un limitado grupo de personas, más aún con el argumento que recibí, en el sentido que por semana, a lo menos hay tres o cuatro programas relacionados con el tema del 2012 y por supuesto de los OVNIs - televisión abierta y cable -.
Pero mi sorpresa fue sublime, cuando el propio director me señaló que los personajes y sus características, sencillamente las obtuvo de los mismos programas que observó durante algunos meses con este fin. Es decir, en la formación de los personajes, sólo fue necesario prestar atención, escuchar y observar gran parte de las conferencias, presentaciones, como también, entrevistas realizadas precisa y únicamente por connotados ufólogos de todo el orbe, sin dejar de lado nuestro país.
No voy a detallar partes claves de esta presentación teatral, porque honestamente espero que la vean. Pero me sorprendió que un actor, escritor y director teatral sin mayores conocimientos del tema ufológico, haya concluido sus observaciones televisivas en este producto, es decir en una parodia, ya que de encontrarse con otra realidad en sus análisis, es muy probable que su iniciativa haya concluido en otro tipo de trabajo literario, por ejemplo drama o en la tragedia. Pues la respuesta la brinda simplemente su obra, una comedia.
Esta extraña revelación, me hizo pensar que parte de lo expuesto en este blog, no se encuentra tan alejado de la realidad contemporánea, en el sentido de calificar parte de la ufología como un verdadero circo.
Abducciones, contactismo, energía, islas mágicas, implantes, sanaciones cuánticas, hipnosis y una gran variedad de elementos afines y entrelazados con la ufología fueron expuestos de manera cándida y simpática, tal cual se exhiben diariamente en algunos programas de nuestra televisión. Todas ellas, con las más variadas explicaciones descaminadas y paranormales, propias de la tónica en la cual se ha intentado complementar los fenómenos aéreos no identificados.
Recomiendo esta obra a ojos cerrados. Si ya en Chile, el género de las teleseries tomó al profeta de Peñalolén como tema indirecto para uno de sus productos, el teatro no podía quedar ajeno a la idea que desde el punto de vista ufológico tenemos una gran gama de razas, es decir un verdadero zoológico, pero no precisamente de extraterrestres, sino por el contrario de algunos connotados ufólogos.

viernes, 21 de octubre de 2011

FECHAS Y NÚMEROS

Hoy 21 de Octubre, se rememoran treinta y tres años de la desaparición de un avión Cessna 182 en las costas cercanas a la ciudad Melbourne, al sur de Australia. Hablamos del famoso caso “Valentich”, ya que el piloto protagonista de esta historia se llamaba Federick Valentich.
Este reporte es uno de los casos aeronáuticos más importantes del mundo, donde la interacción registrada de un Fenómeno Aéreo No Identificado con una aeronave en vuelo, tiene un trágico desenlace con la desaparición del Cessna 182 y su malogrado tripulante.
La mención de este caso, aludida por su trascendencia aeronáutica, corresponde a uno de los escasos reportes de OVNIs, vinculados con accidentes aéreos. Digo escasos, porque a nivel mundial se conocen alrededor de cuatro fatalidades aéreas, pero en ninguna de ellas se ha podido comprobar la directa responsabilidad en el incidente del OVNI reportado, salvo el accidente de un avión Tucano, perteneciente a la cuadrilla de acrobacia FUMASA, en Brasil el año 1996.
El principal testigo del caso Valentich, Steve Robey Controlador de Tránsito Aéreo del aeródromo de Melbourne, junto con entregar las cintas magnetofónicas con las comunicaciones del incidente, relató con detalles las características del objeto que literalmente, acosó al avión Cessna y que logró observar durante algunos minutos.
Las causas de la desaparición del avión matrícula DJS, fueron presuntuosamente asociadas por los investigadores, a la falla de motor que reportó el piloto en el audio, en los instantes que el objeto alargado de color gris, orbitaba la aeronave por un lapso total de seis minutos.
La contundencia de los testimonios, motivó al Dr. Richard Haines a través de la organización norteamericana NARCAP (National Aviaition Reporting Center on Anomalous Phenomena), a realizar una perentoria investigación, donde los resultados fueron literalmente asombrosos. Este trabajo, muy prolijo por lo demás, fue publicado en una cartilla en la que se entrelaza toda la información obtenida después de cinco años de ardua y meticulosa pesquisa.
Particularmente y en mi modesta opinión, los casos vinculantes de OVNIs en el mundo aeronáutico, son los que aportan la mayor contundencia, principalmente por la cantidad y calidad de información que conllevan. Esta se separa en los registros electrónicos que algunas veces poseen, como así mismo, en la particularidad de los testigos. Hago mención a que el pasado 20, es decir ayer, se celebró el día del ATC, Controlador de Tránsito Aéreo, (Concediéndome un paréntesis y breve saludo a mi esposa). Pero cuando se discute acerca de la casuística ufológica, es común comparar factores primordiales en los diversos reportes, siendo en definitiva las evidencias, las que entran a competir, buscando legitimar un determinado avistamiento o interacción con un FANI. Por tal razón, desde la apertura del mundo aeronáutico al estudio de este fenómeno, sus diversos informes son los que en este instante, contribuyen con un grado superior de información y las razones obedecen exclusivamente, a que los testigos son poseedores de una objetividad y por ende, una mayor confianza en la entrega del llamado dato duro o clave, para concertar si la anomalía declarada, obedece a lo que estamos intentado estudiar, los OVNIs.
El libro ufología aeronáutica, en un decidido intento por congregar reportes de esta índole, se ofrecen 23 casos, donde son exhibidos informes de pilotos y controladores aéreos, que pese a su ecuánime proceso de análisis, alcanzan un porcentaje muy extraño en cuanto a las tipologías advertidas en las observaciones. Me refiero a que el 78% de los FANIs reportados son disímiles, exhibiendo las más variadas formas, tamaños, colores y movimientos.
Este atrayente examen, es un verdadero dolor de cabeza al momento de buscar analogías y relación en el estudio del fenómeno, pero por otro lado, genera una desafiante invitación a destrozar paradigmas (como siempre señala Nicolás) y aventurarse en repasar abiertamente las diversas hipótesis que expliquen estos singulares números.
Confieso públicamente que me cuesta demasiado hacerlo. Hay personas que ya comenzaron, en mi caso, me reservo el derecho a esperar el tiempo que sea prudente. Quizás me muera esperando.

jueves, 20 de octubre de 2011

MULETILLAS UFOLÓGICAS

Cuando hemos observado por años el acontecer vinculado al tema de los OVNIs, que seductor parece para algunos investigadores, el mencionar las palabras o frases claves en la ufología mundial. Estas muletillas asociadas a un reporte o “caso”, son por mencionar algunas: “se observó”, “fue visto”, “se vio”, “lo dijeron”; y las más comunes por su puesto: “se cree” y obviamente “se piensa”. La interrogante que siempre nos hacemos es, qué fue lo que se vio, cuándo, quién es el que cree y por su puesto quién es el que piensa tanto.
Hago mención a estas verdaderas muletillas ufológicas, después de revisar un gran número de entrevistas a diversos investigadores en todo el orbe y sin dejar de lado nuestro amado Chile.
Fíjense que después del terremoto del 27F, se produjo un acercamiento a la ufología criolla y a parte importante de sus exponentes, buscando el prolijo análisis de ciertas imágenes previas y posteriores al evento telúrico, en las cuales se sugería una especie de aviso o predeterminación de que se encontraba en curso, uno de los mayores movimientos sísmicos del planeta.
En aquellas entrevistas, fuimos testigos de frases dignas para una placa de bronce, como por ejemplo “se tienen datos de que los ovnis tendrían bases en la cordillera o en el mar”, vinculando a ellos (háblese de los ovnis), una actitud defensiva frente a las catástrofes, ya que..”se pondrían a salvo”, además se especuló que: “Estos objetos, pertenecen a varias razas superiores que nos estudian”, asociando a todas las catástrofes naturales, avistamientos de estos seres vigilantes, incluyendo Chile, con la observación de dos supuestos “alienigenas” en la playa de Cobquecura posterior al tsunami.
Como en muchos aspectos de otras esferas, hablemos de política, la esfera social, la economía etc., nuestro país esta atrasado en el desarrollo de ideas y de correcciones en los modelos, donde no se excluye la ufología pese a no ser una ciencia.
Por esta razón, cabe recordar que en el año 1969 fue publicado el libro Pasaporte a Magonia, del científico Jacques Vallé.
Esta publicación marca un hito trascendental, ya que es considerado uno de los detonantes de la muerte de la ufología clásica en Europa, por el sencillo hecho de sacar a la luz los mitos y leyendas vinculados a la hipótesis extraterrestre y a sus condimentadas historias que tanta difusión exacerbada tuvieron, sin ningún tipo de cuestionamiento posterior al año 1947. (Según algunos ufólogos el inicio de la era moderna de los OVNIs.)
Pero resulta que en Chile también tuvimos, en efecto tenemos, un libro que marcó un precedente en el año 1999 y fue precisamente en homenaje a la obra de Vallé. Me refiero nada menos que a “Pasaporte a Ovnilandia” del abogado Sergio Sánchez R. (La nave de los Locos).
Muchos de los que se exponen aficionados a los OVNIs, deben haber leído esta verdadera obra maestra de nuestra literatura ufológica criolla. De lo contrario, lo recomiendo a ojos cerrados y hago esta mención porque, es probable que en su momento, este ensayo buscó separar las aguas erráticas por las cuales navegaba nuestra investigación ovniológica y parte de sus congraciados exponentes.
Creo que en un tiempo, cumplió su objetivo indirecto y por algunos años, se mantuvo una especie de prudencia en cuanto a los discursos y exposiciones mediáticas relacionadas con los OVNIs. Pero tal cual simula un cáncer, pese a que intentemos extirparlo, de no mantener un constante tratamiento, siempre vuelve malignamente a contaminar el medio donde habita. Siguiendo esta cruda semejanza, no ha sido la excepción nuestra ufología y menos algunos de sus expositores. Determinados ilustres con años de circo, otros emergentes y propios de la sabia renovadora generacional, que vuelven a caer en las seductoras tentaciones de expresar sus doctrinas personales sean comprobables o no, frente a un tema que sigue siendo una incógnita, pese a los terremotos, a los tsunamis, a los supuestos proyectos norteamericanos, a las conspiraciones y obviamente a la maratón 2012 que ya está en curso.
Pienso que a este desenfreno de inescrupulosas hipótesis y “algunas teorías”, es necesario revisar y hacerlas dignas de un cuestionamiento. No por el lucro que generen, palabra muy de moda últimamente, sino porque después de tanta fantasía y delirio, es siempre recomendable poner los pies en la tierra, decir las cosas por su nombre y aprovechar estas instancias de dialogo para aceptar, que ya por fin en nuestro país, se murió la ufología clásica. Esa de los “se cree”, “se piensa” y “se tiene”. Esa del clásico “tenemos la evidencia que faltaba”, esa de “en Chile se censura la información del fenómeno”, ó simplemente “tengo contacto y me hablan unos extraterrestres”.
Ojala que Irenko esté de acuerdo con mi tajante postura, de lo contrario por el plan Auge reclamaré una hora a Friendship, a ver si me aquietan la ansiedad por estudiar prudentemente un fenómeno desconocido o sencillamente colaborar con....pregonar charlatanes.

martes, 18 de octubre de 2011

FONDO O FORMA

Observado los diversos comentarios que han generado los artículos de este blog, ha surgido la duda en relación al estudio del fenómeno desde una perspectiva de fondo o de forma.
En el aspecto de forma, creo que están mencionadas las inexistentes academias, escuelas o carreras vinculadas a la ufología y por ende, todos los que les interesan o trabajan en el fenómeno, tenemos la categoría de autodidactas.
Esa afirmación la comparto en un 100%. Donde discrepo y son dos puntos principalmente, es en función al trabajo profesional que se le asocial al tema. Por ejemplo, el personal de planta de la DGAC que trabaja en el CEFAA, no puede ser catalogado de aficionado, porque su labor profesional esta vinculada al estudio y análisis del fenómeno aéreo no identificado. Si se quiere, los que somos asesores externos, incluso vinculados al mundo de la aviación o castrense, podríamos ser aficionados, aunque las designaciones institucionales dicen otra cosa, ya que el ser asesor, incluyendo los profesionales civiles, pasan a ser parte de un trabajo permanente en dicho comité. Pero si en estricto rigor, se asocia esa condición por ejemplo para mí, es un verdadero honor, ya que la palabra aficionado de “afición”, solo tiene por sinónimos aspectos muy positivos, acá tengo algunos ejemplos: simpatía, cariño, afinidad, apego, admirador, seguidor, coleccionista etc., etc., por lo tanto, no se cual es el fin de dar nombres o verdaderos “títulos de nobleza” a un determinado campo en el cual estamos inmersos todos y la idea es conocer más de algo que en el fondo, somos muy ignorantes.
Por otra parte, podría perfectamente hacer eco a algunos comentarios y apartarme o personas del comité ausentarse y no participar en diferentes eventos ufológicos, alegando como razón el no inmiscuirnos con ufólogos que mantienen una posición deferente en el tema.
Pero resulta interesante analizar que desde su reapertura, el CEFAA a organizado una serie de charlas mensuales en dependencias de la ETA y a cada una de ellas se ha invitado a todas las agrupaciones, como al público en general, dando la posibilidad de exponer a todas las posiciones en relación al fenómeno, desde las más escépticas, a los incluso contactados, pasando por astrónomos, radaristas, controladores etc.,etc., ¿Cuál es problema?, es que a cada una de ellas, a lo más han asistido treinta personas - siendo generoso -, por lo que es necesario y muy necesario por lo demás, el participar en los eventos ufológicos que seamos invitados, considerando que no a todos ellos se invita al comité o alguno de sus asesores, para mostrar la visón o el trabajo que ahí se realiza y de esa manera, intentar hacer una educación ufológica. Me refiero a educación ufológica dirigida en el fenómeno y apegada a una perspectiva aeronáutica, para que a los interesados les sea plausible apreciar todas las posiciones y que cada cual, libremente elija la que más le acomode o guste. Eso es todo.
Ahora, cuando se realizan reuniones, simposios, coloquios o debates científicos donde la razón de ser del CEFAA, apegada a la seguridad de las operaciones aéreas y a las ciencias vinculadas a la aeronáutica, se enfocan desde una figura académica detrás, la postura es unificada en el sentido que la ciencia no admite juicios y si los admite, comenzamos a indagar en el campo de la especulación y de la filosofía, sociología y podemos echar a volar nuestras mentes, como es la idea de este blog, pero que a los reportes de aviación no sirven, ya que si alguna vez –espero que no suceda- uno de estos FANIs choca un avión y se pierden vidas humanas, créame que las hipótesis, debates conceptuales o epistemológicos, valdrán de muy poco o en realidad de nada.
Por lo tanto, la idea de debatir es precisamente compartir ideas u opiniones en busca de aunar criterios o intercambiarlos, y por su puesto, hablar de este apasionante tema, pero siempre dejando en claro que es mas importante el aspecto de fondo que la forma.

lunes, 17 de octubre de 2011

CONTINGENCIA O CONGRUENCIA

En el pequeño foro hecho para dar a conocer este blog, se han expuesto las más variadas ideas y comentarios, muchos de los cuales estoy en pleno acuerdo y en otros simplemente no.
De todas maneras, confieso abiertamente que me siento muy satisfecho de que efectivamente las personas que se interesan - no son pocos - en el tema de los OVNIs, den a conocer abiertamente sus opiniones y sus descargos. Como ahí es mencionado, por años siempre se han comentado publicaciones, apariciones en televisión, aciertos y desaciertos de “ufolandia”, pero siempre de forma subyacente, es decir en conversaciones de pasillo, eventos ufológicos, conferencias, en algunas casas, en foros, facebook, chat, etc., pero quizás pecando o como parte importante de nuestra idiosincrasia chilena, muy acostumbrada a no decir las cosas a la cara y mirando a los ojos (si es posible claro).
Apegado al comentario de Mario Valdés, con quien hemos conversado este interesante y preciso tema por horas, me hago eco de la duda que señala y está dirigida al nombre de este foro. Entonces viene la pregunta de rigor; ¿Esto debe ser “Contingencia” Ufológica o “Congruencia” Ufológica?
Caminando por las definiciones literales de estos verdaderos conceptos, la palabra “Contingencia” tiene el significado de la posibilidad o riesgo de que suceda un hecho, como también es un problema que se plantea de forma imprevista. Sin dejar de lado, por cierto, la definición mediática, que nos señala simplemente hechos del presente o del diario vivir. Haciendo el paralelo con la palabra “Congruencia”, cuyo significado es la relación lógica establecida entre dos o más cosas y basado en la pregunta directa de Valdés en correlación a si yo estaba haciendo política, relaciones públicas o bajando el perfil a interpretaciones oficiales de fenómenos recientes, creo que la palabra contingencia es la más acertada y por ende le puse este nombre.
La idea del foro es esa, dar a conocer las ideas y problemas que se suceden de manera imprevista, ya que cuando hablamos de OVNIs, no existe ninguno que sea previsto. Si alguien menciona por ahí los contactos programados del Sr. Sixto Paz, muchos de nosotros sabemos que son un verdadero timo, con algunos discípulos moviendo focos de luz a una distancia que no puedan ser detectados por las cámaras que registran tales encuentros.
Pero volviendo a lo nuestro, mencionado es el caso de la estela de condensación que se observo el 01 de Octubre en las costas de la V Región de Chile, el cual motivó la publicación de un comunicado Oficial de la DGAC, dando a conocer simplemente que no correspondía a un fenómeno meteorológico. Pues bien, el informe es verdadero y certificado, pero lamentablemente, alguien de la DGAC divulgó aquel documento sin antes consultar a los que trabajan precisamente estos temas, el CEFAA y en profundidad, la Dirección Meteorológica de Chile. Las razones, aún no precisadas obedecen a esta inmediatez de respuesta que se requiere por parte de la autoridades frente a cualquier tema de “Contingencia”, motivo por el cual en una reunión del CEFAA, se comentó que este tipo de información debe ser entregada, una vez que se tengan todos los antecedentes y que se haya realizado una indagación en profundidad.
Destacado es el trabajo de Marcelo Moya, el cual no escatimó en tiempo, ni en recursos para publicar su investigación muy acertada y clara. Por tal motivo, ya se están tomando las medidas y esperamos que no ocurra algo similar en eventos futuros.
En cuanto al comentario de los aviones pillan, bajo ningún punto tengo prejuicios en dar a conocer el hecho de que no siempre se tiene la razón en este tema, incluso la propia posición del CEFAA, comité en el cual trabajo como asesor y representante del Ejército de Chile.
El director del CEFAA, da a conocer que lo que se aprecia en ese video, el cree que no son aviones, pues bien, pienso que será aclarado en las conferencias futuras donde tendrá participación y eso no es de extrañar que si alguien se equivoca en un concepto o en emitir un juicio es completamente entendible, somos todos humanos ¿o no?. Hemos concertado que en el tema ufológico, nadie tiene la última palabra. (Si Mike me dice lo contrario....bueno es otra cosa, es un mensaje celestial y no tengo herramientas para discutirlo).
Pero ya que hablamos de contingencia, dando vuelta por la Web se encuentra el video donde, supuestamente, hay censura por parte del organismo gubernamental de investigación chilena, titulado “CEFAA censura información O.V.N.I. jueves 22 septiembre 2011”.
Sin dejar de comentar esta publicación, que para ser sincero, en primera instancia no pude contener una carcajada al momento de verla y leer los comentarios expuestos, al realizar las observaciones, creo que este tipo de procedimientos son propios de personas anhelantes de publicidad y de reconocimiento, enlodando el trabajo del resto de los investigadores, ya que al momento de ser expuestas estas imágenes, el propio expositor (Gral. Bermúdez) solicitó no registrarlas ya que se encuentran aún en proceso de investigación y simplemente quiso compartirlas con el público asistente a esa charla, yo era uno de ellos. La pregunta es, si la culpa es del expositor que las muestra o del que quiere aprovecharse de esa instancia. Para mi modesta opinión, creo que la responsabilidad esta en quines desean sacar provecho de algo tan sencillo y que por lo demás, va en contra de la política actual de este comité, el de tener las puertas abiertas y de entregar toda la información a las personas que se las solicite. Creo que para las próximas exposiciones de esta índole, simplemente se podrá exhibir lo que hasta ese momento se tenga analizado y con resultados concluidos, porque de lo contrario, pasa este tipo de desafortunadas situaciones, donde algunos inescrupulosos intentan colgarse de algo inexistente, justamente para crear una “contingencia” ficticia, sacada de las más entretenidas y oscuras aventuras de Fox Mulder.
Como se ve el panorama, creo que Chilenasa esta navegando en aguas propias y muy solitarias.

domingo, 16 de octubre de 2011

COMENZO LA MARATON 2012

Hace unos días se anunció en todos los medios de comunicación social, la aproximación a la tierra del cometa Elenin y una supuesta alineación entre este, el sol y nuestro planeta.
Haciendo eco a nuestro premio nacional de ciencias José Maza, las personas que difunden este tipo de información, cometen un grave error acompañado de una irresponsabilidad sin límites, ya que comparó el anuncio de posibles catástrofes asociadas a fenómenos astronómicos, con el asustar a un niño que no conoce en absoluto las explicaciones de variados acontecimientos de la vida cotidiana, aprovechándose sin contemplación de su ignorancia, de su confianza y de su absoluta inocencia.
No es de extrañar que en Chile, al igual que en otros países, algunos especuladores ufológicos dieran a conocer la información de Elenin como el segmento inicial de todos los cambios y las catástrofes, que son la antesala de los esperados acontecimientos en relación al 21 de Diciembre del 2012, ya que según las predicciones Mayas, para esa fecha está profetizado “algo”, que aún no se define bien qué es, pero trae implícito a lo menos un cambio. ¿De qué? No se precisa aún, pero el acontecimiento viene, eso los difamadores no lo discuten y lo peor de todo, es que están de acuerdo al unísono.
Así mismo, en estos últimos meses hemos podido observar cómo una serie de investigadores – la gran mayoría de ellos, autodidactas en la materia, es decir aficionados a los OVNIS - han sido invitados a exponer sus nociones y juicios a emisiones televisivas, entre los cuales se encuentran reportajes, documentales, pero los que lideran estas quimeras, son las entrevistas en los programas de farándula. Con este punto, obviamente podemos concluir que el tema vinculado al 2012, ya se está posesionando dentro de la contingencia “farandulera” de nuestra susceptible sociedad Chilena. Un gran honor y solemne mérito por lo demás. Pero de todo este bullicio mediático, resulta interesante el poder analizar los diversos géneros expuestos, en los cuales se puede obtener entre líneas, las innovadoras estrategias comunicacionales de algunos aficionados a los temas paranormales, entre ellos el ufológico, para no caer en la charlatanería, pero sí dejar hábilmente una ventana a la especulación y al pensamiento mágico.
Para comenzar el análisis, concertamos que el tema es atrayente. No hay duda al respecto, pero ¿Atrayente para quién?, para las personas que se sienten seducidas por la profundización del conocimiento de todos los enigmas que rodean al ser humano, porque hay gente que no le interesa estos temas, también es un hecho y muy respetable postura además. Pero, esta afirmación filosófica y muy propia del hombre, ha sido la que con investigaciones, debates y experimentación ha logrado responder a los nuevos desafíos en todos los campos y todas las épocas, es decir, ha sido esta inquietud la responsable de la creación y del desarrollo de todas las ciencias y el conocimiento, basados en una metodología de investigación, apegados a la razón y a la lógica, aunque les moleste a algunos.
Sin dejar de lado la idea inicial, las tácticas comunicacionales de los actuales expositores de lo paranormal, no dejan de sorprenderme. Por ejemplo, en la ufología chilena existe un organismo oficial, que trabaja en el estudio y análisis de reportes aeronáuticos el CEFAA, Comité de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos de la Dirección General de Aeronáutica Civil, que además ofrece la posibilidad de indagar algunas evidencias otorgadas por personas no vinculadas al mundo de la aviación, los cuales entregan fotografías o videos en los que se aprecian fenómenos aéreos sin explicación hasta ese momento. Estas evidencias, si es el caso, se envían al extranjero para una mayor profundización en los cotejos y posteriormente se informa a los interesados los resultados finales y las conclusiones para descartar o no la presencia de algún fenómeno anómalo.
Pero además, junto con estos estudios, este comité recibe los reportes aeronáuticos provenientes de nuestras rutas aéreas, compuestas por 5 regiones de vuelo (FIR), 7 aeropuertos, 320 aeródromos (70% privados) y de un promedio total de 500.000 operaciones aerotransportadas al año. Por lo que el nivel de información, análisis y trabajo de sus asesores internos y externos es de calidad reconocida internacionalmente. Sumémosle a estos datos, la política de puertas abiertas y de absoluta transparencia en la cual se desarrollan las investigaciones, detalle que ha sido empleado por investigadores aficionados para complementar sus estudios autodidactas, pero también ha sido una arma de doble filo para otros, ya que con este nivel de nitidez y de flujo de la información, las personas interesadas en el fenómeno OVNI han obtenido un mayor acceso a datos objetivos y sustentables en el tiempo, como también, ha aumentado el nivel de cuestionamiento a las afirmaciones, comentarios y experiencias personales que los especuladores ufológicos puedan publicar a través de sus entrevistas o programas de televisión. Por esta razón, y retomando la idea central, es que hoy algunos de los más connotados divulgadores ufológicos han modificado sus técnicas de transmisión de información.
De esta manera, hemos sido testigos de cómo algunos ufólogos han realizado entrevistas, dentro de las cuales fusionan sus discursos apegados al escepticismo, muy volátiles por cierto, con apariciones irrumpiendo en eventos donde se vinculan regresiones, para obtener mayor información de los supuestos extraterrestres contactados o simplemente relatando contacto con seres provenientes de otros mundos, galaxias y/o dimensiones. Sin dejar de mencionar, las invitaciones a diversos programas de contactados emblemáticos, los cuales no escatiman en difundir sus experiencias y trasmitiendo sus recados o mensajes celestiales impunemente, ya que son dueños de un presumido discurso y posesionados - bajo su criterio- de una verdad absoluta e incuestionable. A esto se suma, que otra parte importante de investigadores hacen mención a una postura más bien aterrizada de los sucesos venideros en el 2012, pero no escatiman en mencionar si, la urgente necesidad del cambio a nivel conceptual, energético e incluso espiritual al que estamos siendo sometidos los seres humanos, por la sencilla razón de que se nos aproximan tiempos llenos de incertidumbre y caos.

Cuando hago mención a estos discursos, que para mi modesta sensatez, marcan un doble patrón, hago juicio con lo que llamamos “la consecuencia del comportamiento humano”. No profundizaré en aspectos de contingencia, pero se demuestra claramente con algunas personas vinculadas a la política chilena en directa relación a los sucesos y cambios sociales que vive hoy nuestro país. Ya que algunas de sus posturas dicen ser una cosa, que desafortunadamente no son demostradas con los hechos concretos, es decir en buen chileno, lo que predicamos, no se condice con lo que hacemos. Pero en fin, al parecer las malas prácticas de esta índole, no están ajenas en la ufología criolla.
Es por esa razón, que sosteniendo un apego por el diálogo y sobre todo el debate, tengo el absoluto convencimiento de que a la ufología chilena, le hacen falta urgente dos cosas de vital importancia. La primera de ellas, es la educación en relación al tema, ya que desde hace un tiempo, se han inyectado ideas que son propias de especuladores que no pretenden otra cosa que, mantener una latente expectación, que les permita continuar disfrutando de los abultados presupuestos que nuestra televisión ofrece a los expositores de estos temas – esta afirmación es válida desde los matinales a los programas de farándula- siendo muy sincero al decir que, mientras sea honorable la forma de ganarse la vida de una persona no se puede cuestionar, pero aprovechándose de la ignorancia que señalaba José Maza, asustan a inocentes. Y en segundo término, nuestra ufología criolla carece de espacios e instancias para el abierto debate, teniendo presente que a algunos de estos investigadores aficionados, nos les acomoda tales encuentros, ya que corren un alto riesgo de que se manifieste y peor aún, se demuestre públicamente su absoluta falta de rigurosidad, apego al método, ignorancia y por qué no decirlo, a la charlatanería a la que tanto le hacen el quite con discursos unificados de ufología, mística y holística...es decir el fomento en propiedad de las pseudociencias.
Queda claro que estas dos humildes propuestas, pueden en parte ayudar a la toma del correcto camino de la investigación racional, objetiva y verdadera. Ya que desde hace unos meses, se escuchó un disparo de una pistola calibre 22, la que señalaba que comenzó la maratón por el 2012, siendo algunos de sus corredores, miembros honorarios del circo ufológico, es decir expositores irresponsables, inescrupulosos, delirantes y, respetando el noble trabajo de hacer reír al público, unos verdaderos payasos, a los cuales es meritorio y muy necesario desmitificar públicamente y poner al tapete una cuota de seriedad a este siempre manoseado, pero tan interesante tema, “los OVNIs”.