miércoles, 6 de febrero de 2013

LA RACIONALIDAD DE LOS DEBATES

Desde hace un tiempo se han efectuado diversos debates ufológicos por las redes sociales.
En estas discusiones participan casi todos, y bien digo casi, los ufólogos o interesados en este apasionante tema a nivel nacional y algunos extranjeros.
Señalo extranjeros, porque hace una semana culminó una serie de correos que intercambié con el investigador peruano Antony Choy referentes a lo que hoy esta en el tapete, la hipótesis extraterrestre.

Como eran varias personas incluidas en los e-mails y sencillamente le expliqué mis razones y mi pensamiento acerca de su posición....se terminaron las respuestas.
Pero concentrándome en lo que he leído y participado a nivel nacional,  mis reparos apuntan a ciertos aspectos ligados a la forma más que al fondo del asunto.

Cabe señalar que las discusiones mantenidas estos días, sencillamente hablan de la verdadera comedia de los extraterrestres.
La incapacidad de argumentar, de confrontar ideas de fondo, incluso de demostrar con sencillos ejemplos de terceros algunas afirmaciones, rayan en una patético frenesí por defender una afirmación que es literalmente insostenible y  es precisamente la explicación que los OVNIs o FANIs, son de procedencia alienígena.

Así como se escribe, esta más que claro la inexistencia de pruebas que sostengan la HET y la realidad es que gran parte de los ufólogos lo saben.
El problema radica en que las intenciones, deseos y anhelos de algunos, se han transformado en la bandera de lucha de otros.

Como es parte de nuestra idiosincrasia y en un blog anterior (10.Sept.12) hablé de los eufemismos ufológicos, explicando que tenemos una brutal capacidad de disfrazar un discurso absolutamente subjetivo, iletrado y chabacano con un lenguaje digerible y pseudocientífico, aprovechando el escaso pensamiento crítico existente en nuestra sociedad.
Este proceso de eufemismos es muy interesante, ya que se ha constituido una verdadera moda para los seguidores de los alienígenas y los que intentan desesperadamente implantar la intervención extraterrestre en la historia de la civilación humana.
Por ejemplo, es grotesco observar los comentarios de Rodrigo Fuenzalida (AION) intentando asociar la posibilidad de inteligencia extraterrestre, con el misterio del conocimiento o los niveles de conciencia que deberán alcanzar nuestras mentes, para comprender estas anomalías. Estos comentarios los realiza casi siempre después que se muestra algún regsitro (falso o cuestionable) de la ruta turística que se intenta posesionar en el Maule.    
También cae en eufemismos ufológicos Eric Martínez de CIFAE Chile Ovni aventura, cuando señala explícitamente que la respuesta al fenómeno es individual y según la experiencia que cada uno tenga. es decir....la subjetividad por sobre la objetividad.
Pese a ser la cara visible de Exopolitics Chile, Nicolás Berasain ha manifestado abiertamente su pensamiento de la presencia alienígena en nuestro planeta, pero tal cual señala, sin una sola prueba y a lo más diez casos a nivel mundial que lo llevan a mantener su especulativo pensamiento. Por lo menos invita al debate abierto y eso es un sano ejercicio al pensamiento y argumentación de las posciones.  
Para que mencionar al investigador de todos los misterios Alberto Urquiza, quien de manera muy prolija retoza con el discurso del enigma de este fenómeno, pero ya ha comentado su experiencia personal con supuestos seres, quienes luego de tocar su cabeza, le señalan la bienvenida a la hermandad.... (algo similar, pero sin palabras a lo vivido por el temucano. Ahí ya tocamos las fibras del misticismo asociado a los OVNIs)
Podría nombrar citas textuales de investigadores nacionales o del extranjero, que en definitiva plantean un discurso ambiguo del supuesto origen extraterrestre del fenómeno, pero que entre líneas manifiestan sus claras tendencias subjetivas al respecto.

Las posiciones de cada cual son absolutamente respetables y definitivamente brindan los espacios para discutirlas. El inconveniente se presenta cuando alguna de estas ideas, muchas de ellas especulativas, pasan a una categorización de panacea o de verdad absoluta del tema que abordamos.
La otra complicación, es la oscilante capacidad de discusión o cotejo de pensamientos expuestos, ya que alguna contrariedad o refutación es considerado casi un insulto y comienza la horrorosa descalificación de las personas, práctica que ojala sea erradicada a la brevedad.

Pese a estas deficiencias y problemas propios de relaciones humanas, creo que las discusiones están alcanzando un nivel mucho más civilizado.
Lo digo con conocimiento de causa, ya que como era habitual, una vez al año tenía serios debates con algunos ufólogos, llegando a puntos de inflexión y bordeando las descalificaciones, pero con el pasar del tiempo y sobre todo la revisión de los entusiasmos, se ha logrado una racionalidad en las confrontaciones, entendiendo que se atacan las ideas y  no las personas. Me refiero explícitamente a Eric Martínez, ya que pese a no compartir en absoluto ninguna de las formulas, estrategias o métodos aplicados a la búsqueda de respuestas, las entonaciones de nuestros intercambios de ideas, han ostentado una madurez bastante interesante.

En el próximo encuentro ufológico de Maipú existirán las instancias de debate, tan necesarias en el estudio de este fenómeno.
Es la oportunidad de aprovechar esta plataforma de discusión e intercambio del pobre conocimiento que poseemos del fenómeno y de los desaciertos intencionados o no, que se han observado en los últimos años, tal cual sucedió con la ilusión de RIOCH, pese a que hubo meses completos que en el programa Neuroufo se habló de las estrategias a seguir para esta red de investigadores que paso a la categoría de etérea y de utópica.

En materia ufológica se deben mejorar ciertos comportamientos, modificar argumentos, plantear nuevas ideas, seguir diciendo las cosas a la cara, en un lenguaje adecuado, pero sin tapujos.  Es decir en ufología y sobre todo en Chile......queda mucho paño por cortar.